Lejos














Está la noche callada,
delante y sola.
Dejas atrás el trabajo,
los ruidos,
las cadenas.
Y el pensamiento se va
lejos,
se me va a tus manos,
se mezcla con tu aliento.

Está la noche callada,
delante y sola.
Dejas atrás los muros,
las máscaras,
los silencios.
Soy libre para tocarte
con mis palabras
y mis versos.
Lejos soy tus latidos.
Aquí, te guardo
mis secretos.

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